Lo importante no es llegar a la cima,
sino disfrutar el camino.
Deja que tus pasos gocen lo andado,
no pises las hojas de otoño
ni las flores del campo...
Mira las nubes, el azul soleado,
el campo verde, los trigales dorados,
y todo lo bello que tus ojos abiertos
te van regalando.
Elda

lunes, 16 de marzo de 2015

Divagando

Mujer pensando / Woman thinking Óleo Lienzo OtrosMujer pensando / Woman thinking

¡Qué cosas tiene la vida!. Cuando eres joven te la pasas diciendo: 
Sino trabajara, haría esto y aquello; si tuviera dinero, iría a este sitio, al otro… me pasaría la mayoría del tiempo viajando. Si fuera más barata la piscina, iría todos los días que pudiera… Y resulta, que pasa la juventud, y ahora ya dispones de más dinero y de mucho tiempo. ¿Qué pasa?, ¿por qué no viajas tanto si tienes todo el tiempo del mundo?, ¿por qué no vas a la piscina que a esta edad es casi regalada?, pues ¿por qué va a ser?, porque ya no tienes las mismas ganas, ya solamente te dedicas hacer actividades, que encima pagas para obligarte a ir, porque sino tampoco irías por pereza. ¡Ay Dios mío, siempre quejándonos! y la mayoría de las veces sin razón.
Lo que sabemos los mayores con certeza, es que cuando tenemos una cosa, queremos otras, y nunca se pueden tener todas juntas.
Yo sin ninguna duda, regalaría todo el tiempo que me sobra junto con el exceso de mis años, y como se suele decir: lo pasado, pasado.
¿Qué tal si tuviéramos otra vida para rectificar lo transformable de la primera…?  

8 comentarios:

  1. Elda... Tienes al gato intrigado, no pierde ojo, ya me contaras que es lo que ve...
    Me he dado cuenta que a menudo hablas del exceso de tus años...
    Como dices parece como si las tornas se cambiaran, o quizás es la apreciación de la vida la que cambia, pero la vida es un trayecto, tu estas casi empezando-lo, y hay que gozar el camino,gozar el paisaje, aunque aveces lluvia o haya tormentas, pero luego el día es mas claro y soleado...
    Felices años... Elda. Un abrazo.

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    1. ¿Empezando el qué?, jajaja, no me habrás equivocado con una de mis hijas, ¿NO lo dirás por las piernas que he puesto aquí?, así las podría tener yo con quince años, allá por el Jurásico, jajaja. Y el gato mira para arriba porque tú no le distraes con el puntero.
      Fuera de bromas Llorenç, muchas gracias por visitar mis divagaciones, las que sin duda tiene todo el mundo de mi edad.
      Un abrazo.

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    2. Tu no tienes edad, tienes historia..!!

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    3. Mira, eso si es verdad, historia tenemos todos, aunque unos más interesante que otros... La mía no daría ni para un simple corto de cine, pero no por corta sino por simple, jajaja.

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  2. Hola! Te he hecho una nominación para los Liebster Awards, pásate por mi blog cuando puedas: http://relatoscortosconcafe.blogspot.com.es/

    Un abrazo

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    1. Muchas gracias Geus, ya te contesté en tu blog.
      Un abrazo.

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  3. Tienes toda la razón, Elda. Yo también dije estas cosas y muchas más. Quizá lo que nos distingue a los que tenemos una cierta edad con respecto a los jóvenes es la pereza. Ahora que estoy jubilado, sigo posponiendo algunos deseos. Ahora me digo. Cuando mi mujer esté jubilada podremos hacer escapadas cuando nos apetezca. Veremos qué ocurre cuando, de aquí unos años, llegue la ocasión, jaja
    Un gusto leerte.

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  4. Jajaja, es cierto... las cosas que te hacían ilusión se van difuminando, hasta las más pequeñas; es una lástima, pero así es. Hay que tirar bastante de la fuerza de voluntad ¡qué pesadez!, jajaja.
    Muchas gracias Josep por compartir.
    Un abrazo.

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